En cualquiera de sus versiones (codo de tenista, codo de golfista o codo de escalador).
Se caracteriza por un dolor localizado en el codo que se irradia posteriormente al antebrazo, llegando en estos casos a impedir coger objetos con la mano u ofrecer resistencia con la misma.
Entre ellas encontramos el “codo de tenista” también llamada epicondilitis o epicondilalgia y el “codo de golfista”, epitrocleitis o epitroclealgia.
En cualquiera de sus versiones (codo de tenista, codo de golfista o codo de escalador).
Es la lesión del tendón de los músculos del antebrazo llamados epicondíleos, que provoca dolor en la parte externa del codo que suele irradiarse hacia el antebrazo. Técnicamente se le denomina epicondilitis lateral.
Otro de los síntomas es dolor o disminución de fuerza al apretar el puño y en casos más avanzados, dolor y perdida de fuerza en actividades cómo abrir una puerta, coger una botella, etc.
Sobreesfuerzos que impliquen una extensión de muñeca, como el uso del ratón del ordenador, agarrar el manillar de la bicicleta, deportes como tenis o pádel y determinadas actividades laborales.
El tratamiento consiste en terapia manual para devolver el tono normal a los músculos del antebrazo y mejorar la vascularización, estiramientos pasivos, neurodinámica y electroterapia complementaria.
Asimismo, nuestras fisioterapeutas te indicaran qué debes o no debes hacer con el fin de acelerar la curación.
Es la lesión de los tendones de los músculos flexores del antebrazo que provocan dolor en la parte interna del codo.
Sobreesfuerzos repetidos que impliquen una flexión de la muñeca como coger bolsas, deportes como el golf, llevar bandejas con peso, etc.
El tratamiento consiste en terapia manual para devolver el tono normal a los músculos flexores del antebrazo y mejorar la vascularización, estiramientos pasivos, neurodinámica y electroterapia complementaria. Además se darán una serie de pautas a seguir con el fin de conseguir una pronta recuperación.